jueves, 18 de septiembre de 2014

Periodo Intertestamentario

Concretamente hablando.





Pericles 450 AC convirtió a la Confederación de Delos en el Imperio ateniense, y dirigió a sus compatriotas durante los primeros dos años de la Guerra del Peloponeso. Grecia alcanzo grandes avances en muchos campos y a este siglo se le llamo el Siglo de Pericles.

Se trata de una época histórica en la que el poder de las polis griegas y las manifestaciones culturales que se desarrollaron y alcanzaron su apogeo maximo llamado a grecia "la grecia clasica". El pueblo judio no era ajeno al auge griego, sin embargo ellos mantenian sus tradiciones atravez de la ley mosaica,Tanaj, el talmud , Asi en paralelo con esos tiempos se data al ultimo profeta hebreo en cauteverio dado por los Babilonicos que habian sometido a al pueblo hebreo en 586 AC al mando de Nabuconodosor II y puestos posteriormente en libertad por Ciro en 538 AC. 




Nota.
Los Asirios en 721 AC habian tomado antes el norte de las tierras Juda
llevando a los hebreos a Ninive. Asirios y Babilonicos se enfrentarian lo que dejaba por un tiempo tranquilos al pueblo hebreo.
Norte y Sur ambas comunidades habían oportunamente sido advertidas por los grandes profetas, Elías e Isaías, respectivamente. Pero estas son etapas mas antiguas y no se abordara el tema.



Volviendo.
El imperio Babilonico que extendia su poder por muchos siglos era dominado e
invadido por Dario el grande rey de Persia dandole  la  libertad al pueblo hebreo. Quizas era un movimiento estrategico pues al oeste estaba el creciente imperio de Egipto y seria para Percia un estado tapon geopoliticamente hablando cuidaria intereses militares.




Asi Malaquias (mi mensajero) 450 AC seria el ultimo profeta del exilio dejando a los escribas a la interpretacion de la ley en el pueblo hebreo. hasta aqui pasarian cuatro siglos  y sera el precursor, a quien él mismo anuncia (como también la vuelta de Elías: cf. 3, 1 y 4, 5 s.), y a quien Jesús había de caracterizar como el último y mayor profeta del Antiguo Testamento, al decir: "La Ley y los profetas llegan hasta Juan"



El mundo fue conquistado por Alejando Magno 334 AC y tras su muerte en el 323 AC dejo a sus reinos no consolidados llamado Periodo alejandrino o Helenistico. La supremacia macedonica se extendio por bastos territorios de ello se sabe por que dejo el idioma griego segregado por sus conquistas. 



El mundo no conoceria un imperio tan grande como el de Alejandro


Roma que se expandia tambien en el S III AC vencia a los imperios de Cartago , Seleucida y ciudades griegas, en 167 AC Lucio Emilio Paulo regresa con el rey de Macedonia, Perseo, como su prisionero para su triunfo en Roma, donde los macedonios capturados son vendidos como esclavos.
Por oriente Roman toma  un pueblo poderoso aliado de los antiguos persas llamado "Partia" toman una importate ciudad "Herat" y con esto rompe la ruta de comercio llamado "la ruta de seda" hacia china  el tráfico comercial y la comunicación entre el extremo oriente, el subcontinente Indio y la cuenca del Mediterráneo. Los Helenos de Bactria (ciudad en asia central que siglos  antes habia tomado alejandro magno quedaria aislado) El imperio Helenistico daba un paso al costado y el imperio romano dominaba el mundo.




En 143 AC  imperio Seleucidas (heleno) ya venido a menos obligaban a los judios a realizar sacrificios a Zeus y prohibiendo ritos,esto origino una revuelta. Con Judas(Martillo) Macabeo y sus hijos  que Vencieron a los seleucidas esto originio el restablecimiento de sus costumbres poniendo a Jonatan Macabeo como sumo sacerdote. El reino saleucida trato de componer esto dando libertad religiosa, pero los judios tomaron posesion e instauraron sus leyes y con estas sus clases religiosas, fueron cohetaneos  los Fariseos, Saduceos, Escenios y Zelotes.Se establecieron con Simon el sumo sacerdote y jefe del ejercito judio y él fundo la dinasteia Asmonea, estos durarian hasta 63 AC con la venida del general romano Pompeyo que capturó Jerusalén y sometió todo el reino al dominio de Roma. Aun asi la dinastía Asmonea se mantuvo hasta el 37 a. C., cuando el idumeo Herodes el Grande se convirtió de facto en rey de Jerusalén.






Los Saduceos eran un  esencialmente político, descienden de los Hasmoneos, jefes políticos que gobernaron entre 164 y 37 a.C. Los saduceos a parecen en 140 a.C. aproximadamente. Por otra parte, los fariseos descienden de los Hasidim, que quiere decir “los separados” y vienen desde 100 a.C. aunque la primera referencia de ellos aparece en 67 a.C. Dado el hecho de que no había profetas, los escribas se convirtieron en la  clase de intelectuales del pueblo. Otro hecho de muchísima importancia en este periodo fue que apareció la Septuaginta (o versión de los LXX) que es la traducción del Antiguo Testamento que había sido escrito en hebreo, al griego, idioma común en la época, tras la conquistas del Macedonico  Alejando Magno en 323 AC. Esta traducción fue muy importante porque había mucha gente que no leía hebreo y se necesitaba tener las Escrituras en un lenguaje más conocido. Otro  de gran importancia fue la construcción de una réplica del templo de Jerusalén, en el monte Gerizim en Samaria. Fue construido alrededor de 330 a. C. y posteriormente destruido en 109 a. C. por Juan Hircano. Es a “este monte” que se refiere la  samaritana en Jn. 4:20 al hablar con Jesús. A esa altura ya el templo había sido destruido pero los samaritanos seguían adorando en sus ruinas. Es en este periodo que aparece la literatura llamada “apócrifa”(libros ajenos) por los protestantes y “deuterocanónica” por los católicos. Estos libros no son canónicos, es decir, no pertenecen a la revelación de Dios. Al Período Intertestamentario se lo conoce como el tiempo o periodo de silencio entre el Nuevo y el Antiguo Testamento. 

martes, 9 de septiembre de 2014

PILATOS El Extraño

Ni Julio César, ni Augusto, ni Nerón… La figura del Imperio Romano más evocada en la Historia es la de Poncio Pilato. Millones de católicoss recitan en el Credo desde época muy temprana -al menos desde el s.II- que Cristo «padeció bajo el poder» de este prefecto romano, subrayando así que la muerte de Jesús de Nazareth fue un hecho histórico.
Poco podía imaginar este gobernador de Judea que iba a ser recordado por aquel proceso. Ni que el gesto de lavarse las manos que relata San Mateo en su evangelio para expresar que Jesús fue condenado injustamente asociaría para siempre su recuerdo con el de una persona que pretende descargarse de una responsabilidad. «Pilato se ha convertido en un símbolo tradicional de la vileza y de la sumisión a los bajos intereses de la política», señalaba José Antonio Pérez-Rioja en su «Diccionario de Símbolos y Mitos».

Del quinto prefecto de Judea, designado por Tiberio, no se sabe con seguridad ni dónde nació ni cómo fue su vida antes de llegar a esta provincia romana que gobernó desde el año 26 al 36 d.C.. El periodista italiano Vittorio Messori, en su investigación sobre la Pasión y Muerte de Jesús titulada «¿Padeció bajo Poncio Pilato?», señala que era de la noble familia de los Poncios, originaria probablemente del territorio samnita próximo a Benevento (Italia). Pertenecía al orden ecuestre, no a la clase senatorial más aristocrática, por lo que a ojos de sus superiores era «un hombre obligado a “hacer carrera”», según el teólogo José Antonio Pagola («Jesús, aproximación histórica»).
Cuando recibió a Jesús aquella víspera de la Pascua del año 784 de la fundación de Roma, llevaba siete años al frente de esta conflictiva provincia romana cuya capital era Cesarea Marítima, a unos 100 kilómetros de Jerusalén, donde contaba con cerca de 3.000 soldados. Pilato solo acudía a la ciudad sagrada de los judíos en las fiestas y entonces se alojaba en el palacio-fortaleza construido por Herodes el Grande. En la ciudad tenía dos cohortes auxiliares de guarnición, con cuartel en la Torre Antonia.
Una piedra del anfiteatro de Cesarea hallada en 1961 por arqueólogos italianos con una dedicatoria de Pilato al emperador Tiberio confirmó el cargo de prefecto de este personaje histórico del que ya daba cuenta Tácito en los Anales, así como Flavio Josefo en sus «Antigüedades judías».
Tanto este último historiador nacido en Roma 37 años después de Cristo, como Filón de Alejandría, coetáneo de Jesús, describen a Pilatos como una persona cruel. Filón señala incluso que se caracterizaba por «su venalidad, su violencia, sus robos, sus asaltos, su conducta abusiva, sus frecuentes ejecuciones de prisioneros que no habían sido juzgados, y su ferocidad sin límite» («De legatione ad Gaium», 302).
Flavio Josefo narra que Pilato introdujo en Jerusalén unos estandartes con el busto de Tiberio, que originaron un gran revuelo hasta que Pilato acabó cediendo y las retiró. Relata también que utilizó dinero del Templo para construir un acueducto. En esta ocasión, sin embargo, las iras judías fueron duramente reprimidas. Hacia el año 35 también reprimió con violencia a los samaritanos en el monte Garizim y ejecutó a sus dirigentes, acción por la que Vitelio, legado de Siria, le ordenó que volviera a Roma para dar cuenta al emperador. Cuando llegó, en la primavera del 37, Tiberio había muerto no hacía mucho. «Según una tradición recogida por Eusebio, cayó en desgracia bajo el imperio de Calígula y acabó suicidándose», señala Juan Chapa, profesor de Teología de la Universidad de Navarra.
Lo cierto es que tampoco se sabe con seguridad cómo y dónde murió Poncio Pilato. Una leyenda cuenta que Pilatos se mató con su propio cuchillo y su cuerpo fue después atado a una rueda de molino y arrojado al Tíber, pero se perturbaron las aguas, por lo que fue llevado a Vienne y hundido en el Ródano. Como volvió a ocurrir lo mismo, se llevó hasta un lago de una montaña cercana a Lucerna (Suiza), aún hoy llamada Pilato.
Otros creen que Pilato fue cesado y desterrado a la Galia donde murió. «Probablemente no fue un hombre tan sangriento y malvado como lo describe Filón, pero ciertamente fue un gobernador que no dudaba en recurrir a métodos brutales y expeditivos para resolver los conflictos», estima Pagola en su aproximación histórica a los hechos.
«Pilato es un tipo de hombre mundano, conocedor del derecho y ansioso de cumplirlo en la medida que pudiera ser hecho sin sacrificio personal de ninguna clase, pero cediendo fácilmente a la presión de aquellos cuyo interés era que él actuase de manera diferente. Él hubiera gustosamente absuelto a Cristo, y hasta hizo serios esfuerzos en esa dirección, pero cedió a la presión de inmediato cuando su propia posición fue amenazada», señala la Enciclopedia Católica.

Tertuliano y Justino Mártir hablan de unas actas hoy desaparecidas sobre el juicio y la crucifixión de Jesús que supuestamente Pilato envió al emperador Tiberio y que dio pie a la creencia de que el gobernador de Judea acabó convirtiéndose al cristianismo, como también lo haría su mujer Claudia Prócula, la misma que según San Mateo le advirtió: «No te mezcles en el asunto de este justo, porque hoy, por su causa, tuve un sueño que me hizo sufrir mucho». A Prócula se la venera como santa en la Iglesia Ortodoxa griega y en la etíope.
Más sorprendente resulta comprobar que el mismo Poncio Pilato, que tuvo en sus manos la vida y la muerte de Jesús, es considerado santo por la iglesia etíope y la copta egipcia. Algunos textos apócrifos le llegan a asignar incluso un final de mártir.

Fuente original (hasta lo que sé) www.cristianodigital.ne